Indignado...

Sí...estoy indignado...escribo esto estando indignado, y quiero pedir disculpas de antemano, por si a alguien le sentara mal algo de lo que aquí dijera, o se sintiera ofendido por mis palabras.
Sé que mi libertad acaba donde empieza la de los demás, pero por eso mismo aviso que, de seguir leyendo, no me hago responsable en caso de que no te guste lo que lees.

Puede que con mis palabras te des por aludido/a y con ellas te sientas ofendido/a…pero es lo que hay y es mi opinión. No sigas si no quieres, pero si empiezas, acaba.

Sábado 9 de Junio de 2007… Son las 23:00 cuando empiezo esto...

El (ejem) país en el que vivo lleva paralizado desde poco antes de las 22 con motivo de la ‘celebración’ de diversos encuentros entre varios equipos…’deportivos’ (yo dudo que lo que hagan los que participan sea deporte…pero bueno)

11 subnormales en cada lado…tres tipos de negro y cientos de miles de…no se cómo definiros…pendientes de cada uno de sus movimientos. Y empieza el partido…

Los 11 subnormales comienzan a hacer su trabajo…ése en el que una vez a la semana y durante 90 minutos, se dan 4 carreras, 4 ostias entre ellos y, a lo mejor, logran sus objetivos, que no es ni más ni menos que marcar un ‘gol’ (o evitarlo).

Millones de euros de sueldo al año (decenas de miles al mes) por trabajar 90 minutos a la semana…

Y alguno de vosotros, algún idiota redomado, me dirá lo de '' no…si entrenan durante la semana… ''Bueno pues a ti, idiota redomado, ¿sabes qué? Que mis testículos entrenan más que ellos. ¿Acaso estás ciego? ¿Cuántas veces, viendo la sección de ‘deportes’ (en la cual y salvo excepciones sólo hablan de uno…el fútbol, por lo que quizá debiera ser ‘deporte’, pero ese es otro tema) has visto imágenes de esos entrenamientos? Muchas, ¿no?, vale.

¿Cuánto tiempo entrenan? 2 horas...3 como mucho. Y ¿cuántas de esas veces, en esas 2 o 3 horas les has visto sudar la camiseta? Por Dios…si van paseando por el césped…PASEANDO. O se pasan el balón, como si jugaran niños pequeños…o lo más de lo más es cuando echan un ‘partidillo’ a mitad del campo…
Y a la mínima que notan una molestia, que no puede ser sino producida por las cantidades de alcohol (y a saber qué más) que se meten en sus fiestorros, o bien por las propias agujetas de cuando hacen ‘algo’ (trotar cochinamente en vez de pasear, por ejemplo), ya se trata de una lesión grave y que hay que observar, por lo que no podrán TRABAJAR esa semana (aunque la molestia les surja el Lunes)

Ahora os pregunto, cenutrios míos… ¿Cuánto trabajáis, aquéllos idiotas que les habéis visto o incluso dado vuestro dinero?En el mejor (o el peor) de los casos, 8 horas al día durante 5 días a la semana…40 horas semanales… O lo que es lo mismo, 2400 minutos a la semana, para medir en los mismos términos.

2400 minutos que tienes que cumplir estés malo, te duela la espalda, el tobillo, la rótula o el alma. Que puede que un día te libres de las 8 horas de rigor; puede que incluso te libres de dos días…pero al tercero, más te vale ir o te quedas en la calle y sin tu sueldo; un sueldo que, tras 2400 horas asciende a… ¿cuánto? ¿1200€ al mes aproximadamente, como media?

Jej...contra uno de decenas de miles al mes por 90 minutos a la semana…hay para pensar que se está haciendo el idiota. Pero sin embargo ahí estáis, delante de la tele, o incluso en el propio estadio, pagándoles, dándoles parte de vuestros 1200€ para que sus sueldos puedan crecer y hacerse más astronómicos todavía…decidme si no es tontería.

¿Por qué todo esto? Muy simple. Porque mi indignación, cada noche de partido, alcanza cotas nunca vistas…y la vuelco en mis palabras para intentar que a alguien le cale un poquito y se de cuenta de lo que hace, que no es más que darle dinero a un circo en el que únicamente trabajan vagos que se enriquecen a su costa.

No son deportistas…son vagos, caraduras, mentirosos y aprovechados.

Los auténticos deportistas tienen que pelearse por tener un patrocinador, que muchas veces les deja en la estacada o les paga una miseria.Van a entrenar entre 4 y 8 horas diarias a un pabellón, una piscina o un estadio…sudan lo que no está escrito y dan el máximo cada día de su vida.No ‘van descalzos’ pero lo que cobran; sus sueldos, no llegan ni con mucho a las cantidades que se manejan en el llamado ‘deporte rey’. Rey en España, donde muchos idiotas le dejan que lo sea…le apoyan sin darse cuenta de que les roba y les engaña.

El rebaño nunca piensa por si solo…pero haz un esfuerzo, abre los ojos, piensa en lo que haces y sal del rebaño.

No dejes que te timen.

P.D.: Puede que no todo el mundo seáis iguales…puede que a alguno no le estén timando. O esté a gusto siendo timado. No pretendo abarcaros a todos en esto. Yo mismo, alguna vez, he visto algún partido…yo mismo, alguna vez, he dejado que me timen. Como he dicho al principio, sólo son mis opiniones en este momento y en este lugar, quizá ‘acaloradas’ por mi indignación.

P.D.2: Del mismo modo, no quiero decir que todo el fútbol sea igual…sin duda muchos hay que están entrenando duramente…y que sin duda merecen más apoyo, más sueldo y más consideración que todos los que vaguean en esos grandes equipos. Ellos son tan deportistas como cualquiera. Ánimo a todos…merecéis mucho más de lo que otros tienen.

¿Qué Primigenio Eres?

Pues tras hacer el test de esta página: http://www.quizilla.com/users/Murkatos/quizzes/Which%20Great%20Old%20One%20Are%20You
resulta que soy...

I am Nyarlathotep! The 999 forms of Nyarlathotep are a point of meditation for the true initiate. It is through these manifold faces that the secrets of the universe are made known. Called "The Crawling Chaos", Nyarlathotep is the disembodied ego of Azathoth and thus the universal "I" of known reality. Some of the many documented forms are; Father of Knives, Nephren-Ka, the Black Man, the Beast of the Lashing Tongue to name a few.

Un lugar donde ir

“Vivo atrapado entre amenazas intangibles que me rodean. Asfaltos, ardiendo bajo vientos de cambio que me bloquean.

Escapo.

Y allí donde yo voy no llega el sonido desesperado del tumulto que lucha por un mañana incierto.

Allí donde yo voy no hay frustración, injusticia ni violencia. Ni sirenas, ni alarmas de coche. Nadie agobiándote. Ni locos soltando tacos aullando en la calle.

Allí encuentras el silencio, encuentras la paz.

Encuentras a Dios.”

Allí es donde yo también deseo ir y donde, desde hoy, encamino mis pasos. Porque allí no llega más camino que el que yo mismo decida hacer.

Y espero que allí donde yo voy, estéis vosotros también, llegados de vuestros propios caminos, donde poder hacer eterno un instante, vivir una vida en un momento y disfrutar cada momento como toda una vida.

Un lugar donde cada golpe sea de suerte, donde cada vez que tropieces haya alguien para cogerte y en el que cada vez que respires y el aire inspires, sepas que vives; un lugar donde poder dejar de buscar el tocar cumbres que nunca llegan y disfrutar del ahora, donde no hay mejora.

Está ahí, al alcance de todos, y para llegar hay muchos modos. Hay que desearlo y ver la pureza en los fracasos por alcanzarlo, evitando que por cada fallo dejes de valorarlo.

Alli es donde yo voy.

Heroes...

HÉROES

Estaba pensando...¿quién fue el inteligente que decidió hacer una serie sobre personas que vuelan? ¿sobre gente capaz de romperse el cuello y seguir tan fresca? ¿y quién fue el inteligente que les llamó Héroes?

No lo son...no pueden serlo.

¿Que por qué? Porque ya de por si todos somos héroes por vivir unas vidas como las que sin duda llevamos.

¿Quién no llega a casa reventado tras un día duro? ¿quién no se ha acostado deseando mandarlo todo a la cresta y en cambio, al día siguiente, se ha enfrentado una vez más al maldito despertador?

Hoy estoy reventado...llevo varios días sin dormir más que unas pocas horas y aún así sigo levantándome a las 8 de la mañana todos los días para calzarme un chándal y unas zapatillas y salir a la calle a sacar a mi perro; a correr con él y a jugar juntos, porque se lo merece por ser quien es para mi. Y más tarde, sigo poniendo un pie delante del otro, sigo caminando todos los días, yendo a comprar el pan; y vuelvo a casa y me meto en la cocina a hacer la comida para mi familia, porque se lo merecen, por ser quienes son para mi.

Y después de todo eso, vuelvo a mi vida 'propia'; yendo a clase, a pelearme con los 'desentornos algo-gráficos' de Java y los 'infames desformularios' de Oracle Forms o simplemente para pasar un buen rato junto a mis compañeros y soltar pifiazos mentales como: "Tío, ahí se te pira la cheeseburguer".
Y por fin, a las 22:00 (más o menos) llego a casa...por fin me quito las destrozadas zapatillas y miro mis pies, que me dicen que ya está bien. ¿O quizá es la mente la que me lo dice? ¿o será todo el cuerpo el que se vuelve en contra mia?, ¿que me pide que le de un poco de descanso bien merecido...?
¿Pero qué se puede esperar? No hago ni caso y me vuelvo, una vez más, a ponerme frente a la cajita tonta conectada al estúpido PC; vuelvo a pelearme con Java o con Oracle; o simplemente con la dichosa conexión ADSL, que lleva revoltosa desde hace un par de días y le ha dado problemas a mi hermana y a mi madre y me toca solucionárselo...porque se lo merecen por ser quienes son.

Ahora mismo, ya habiendo dejado atrás otro duro día, me planteo seriamente si todo esto merece la pena...si todo por lo que estoy luchando, me va a reportar algún beneficio...si no hay una solución más fácil a todo esto...
Y aunque se que sin duda la hay, la deshecho con rapidez, puesto que no puedo aceptarla. Porque sé que tras cada 24 horas que pasan, queda un día menos para alcanzar mis sueños; para poder vivir la vida que espero y que deseo.

Los héroes viven aventuras...sufren derrotas y disfrutan victorias. Hacen esfuerzos para sí mismos...pero hacen más para los demás. Sienten decaer sus fuerzas, pero son capaces de volver a recuperarlas cuando sus sueños están en peligro.

Al igual que nosotros.

No soy capaz de volar, ni de trepar por las paredes. No soy ninguna 'cara bonita'...pero eso no quita que sea fácil ser yo mismo y vivir mi propia vida. Porque incluso los Héroes tienen derecho a sangrar...
Derecho a soñar...
Y también lo tienen a llorar.

Nunca caminaré entre las nubes ni saldré vivo de entre las llamas...pero sé que lograré alcanzar, aunque sólo sea, una pequeña medida de felicidad.

Renacimiento

Y al final sucedió...el tiempo escapa de entre las manos y tienes que decidir con tiento en qué cosas lo empleas y de qué cosas prescindir...y al final acabé prescindiendo de vosotros, los que me leéis. Acabé prescindiendo de esta pequeña ventana abierta desde vuestro mundo al mío y ahora me pregunto si realmente fue por falta de tiempo, o porque al final no sabía o no quería compartirlo.

Pero hoy, animado una vez más a continuar con una labor que quizá tan sólo me sirva a mi, retomo esto donde lo dejé, esperando que esta vez sí que pueda darle rienda suelta y aprovechar todo esto al máximo.

Hoy se puede decir que renace este pequeño lugar; que renace un sitio donde pueda encontrarme agusto, donde pueda dejar lo que me parezca cuando me parezca, sin esperar otra cosa que volver a leerlo dentro de un tiempo y maravillarme de mi forma de pensar...o quizá de lamentarme por no tener en la cabeza otra cosa que lo que dejé aquí.

Y ahora me planteo si esto es tan importante, si esto merece realmente la pena. Paso unos minutos dándole vueltas y al final acabo llegando a mi propia conclusión:
Las cosas no tienen importancia por si solas...las cosas no son más o menos influyentes en nuestra vida, sino que la vida es lo que les da a las cosas su importancia y es lo que influye en el desarrollo de todo lo que hacemos. O a veces, lo que únicamente intentamos hacer.

Dicen los sabios que "más vale tarde que nunca..." Bien, pues espero demostrar que realmente no ha existido ese "nunca" y que sólo llego aquí un poco tarde.

Tardanza que espero que sepáis perdonarme